Nicole Neumann armó las valijas y se fue de vacaciones junto a su marido, Manu Urcera, y sus tres hijos menores: Allegra, Sienna y el pequeño Cruz. El destino elegido fue Europa, y aunque hicieron una escala en París, el plan principal fue instalarse unos días en Copenhague, Dinamarca. “¡Llegamos!”, escribió la modelo al aterrizar. En la postal se los vio sonrientes y relajados tras un extenso vuelo.
Durante el viaje, Nicole compartió detalles de la experiencia de volar en primera clase con su hijo menor. “Sin dudas, el que más equipaje lleva es Cruz”, bromeó, mostrando las valijas del niño. También mostró imágenes de sus hijas en la entrada de un hotel danés rodeado de vegetación. La familia se hospedó en un resort ecológico, decorado con madera y colores cálidos, llamado Bryggen Guldsmeden.
En París, aprovecharon la escala para pasear por el aeropuerto Charles de Gaulle. Nicole filmó una vidriera de Hermès y se detuvo en una góndola llena de souvenirs con forma de Torre Eiffel. Además, una de las nenas eligió un mochi japonés y, al probarlo, dijo: “Sabe a mango…”. La modelo capturó el momento y lo compartió con sus seguidores.
Una vez en Dinamarca, recorrieron la ciudad en bicicleta y disfrutaron de actividades al aire libre. “El verano europeo es ideal para escaparse del frío argentino”, señaló Nicole. Mostró imágenes de Manu pedaleando con Cruz en la sillita y de las chicas recorriendo un sendero entre árboles. Todo transmitió un clima de desconexión y alegría familiar.
CUÁL DE LAS HIJAS DE NICOLE NO FUE AL VIAJE
Indiana, la hija mayor de Nicole, no viajó. Prefirió quedarse en Argentina con su papá, Fabián Cubero. Aunque no hubo detalles sobre esa decisión, sí quedó claro que la relación con sus hermanas siguió siendo cercana. Desde Buenos Aires, Indiana publicó una foto con su hermanito Luca y escribió: “Amor del bueno”, en una clara señal de afecto.
En esta escapada no hubo compromisos laborales ni eventos públicos. Nicole se enfocó en descansar y pasar tiempo con los suyos. Entre las imágenes y los videos, también escribió frases como “Gracias, vida” y “Con el corazón lleno”. Todo indicó que este viaje fue mucho más que un simple paseo: fue una pausa necesaria, familiar y reparadora.